Enfoque Integral y Personalizado al Alumno
¿CÓMO TRABAJAMOS?
El primer paso al trabajar con un alumno es realizar una evaluación integral de sus habilidades y de su entorno. Esto nos permite comprender cómo interactúan sus fortalezas y necesidades con el entorno que lo rodea, y así identificar las áreas que requieren apoyo o adaptaciones. A partir de esta evaluación, establecemos objetivos específicos y diseñamos un plan de intervención personalizado que ajusta el entorno y las estrategias a las necesidades particulares del niño, favoreciendo su desarrollo y bienestar.
Cuando un niño ya ha adquirido ciertas habilidades pero enfrenta desafíos conductuales, comenzamos con una evaluación exhaustiva para entender las causas subyacentes de sus comportamientos. Esto nos permite diseñar estrategias proactivas que no solo enseñan nuevas habilidades, sino que también ajustan el entorno para prevenir y gestionar los comportamientos problemáticos, creando un espacio de aprendizaje positivo y adaptado.
Nuestro enfoque se basa en la creación de un entorno estructurado y flexible, que refuerce las conductas deseadas, favorezca la autorregulación y respete las necesidades individuales del niño. Trabajamos para transformar su espacio cotidiano en un lugar de apoyo, promoviendo un contexto que potencie el bienestar y desarrollo emocional del niño.
Todo el trabajo se realiza de manera personalizada, con sesiones uno a uno. Siempre que sea posible, las sesiones se llevan a cabo en el entorno familiar del niño, para trabajar directamente sobre situaciones cotidianas y adaptar el aprendizaje al contexto natural.
Además, nos aseguramos de que los programas sean adecuados a su edad, entorno y necesidades, y proporcionamos los apoyos necesarios para que el proceso de aprendizaje se lleve a cabo en un ambiente que favorezca la integración, el desarrollo y la autonomía del niño.
Áreas de apoyo:
¿QUÉ ES ABA?
ABA corresponde a las siglas en inglés de Análisis Aplicado de la Conducta. Las intervenciones basadas en el Análisis Aplicado de la Conducta consisten en enseñar aquellas conductas adecuadas a cada niño de modo personalizado, según sus características individuales; además de promover la generalización de estas conductas y reducir los problemas de conducta. Para conseguir este cambio positivo en el comportamiento se emplean los principios y técnicas conductuales.
¿QUÉ ES EL APOYO CONDUCTUAL POSITIVO?
El Apoyo Conductual Positivo (ACP) es un enfoque de intervención basado en la ciencia que se centra en promover el bienestar y la calidad de vida de las personas mediante el fortalecimiento de comportamientos positivos y proactivos. Este enfoque se fundamenta en el respeto por la dignidad y los derechos de cada individuo, reconociendo su capacidad para aprender y crecer en entornos de apoyo. El ACP promueve la autonomía y la autodeterminación, fomenta relaciones positivas y de apoyo, mejora la calidad de vida y el bienestar emocional, reduce comportamientos desafiantes y conflictos y facilita la inclusión social y la participación en la comunidad.
¿QUÉ ES LA TEORÍA DEL MARCO RELACIONAL?
La Teoría del Marco Relacional (RFT) es una aproximación analítico-comportamental al lenguaje y la cognición; se trata de una continuación de la propuesta de Skinner. Esta teoría nos muestra que los seres humanos no solo aprenden a través de experiencias de aprendizaje directas, sino también de forma indirecta relacionando estímulos.
Una vez que la conducta de establecer y derivar relaciones es aprendida, un número infinito de estímulos pueden ser relacionados, independientemente de sus propiedades formales, dadas las claves contextuales apropiadas.
Por ello, es importante durante la enseñanza el entrenamiento de las prerrequisitas para la equivalencia y el aprendizaje relacional que permite respuestas derivadas.
Copyright © Todos los derechos reservados